“Chiribaya” fue presentado en la Videna como la mascota oficial de los XX Juegos Deportivos Bolivarianos Lima–Ayacucho 2025, evento que abrirá el nuevo ciclo olímpico.
Inspirado en el pastor Chiribaya, una raza preinca declarada Patrimonio Cultural de la Nación, el personaje simboliza la amistad entre los pueblos, la lealtad y el orgullo por las raíces ancestrales del sur del Perú.
En los Juegos Bolivarianos Lima–Ayacucho 2025, Chiribaya simboliza la amistad entre las naciones, la alegría compartida y el espíritu de cooperación, valores que guiarán este evento que marca el inicio del ciclo olímpico hacia los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2027.
El pastor Chiribaya fue una raza canina que habitó hace más de mil años en la costa sur del Perú, especialmente en la región Moquegua, donde cumplía funciones de pastoreo y protección de camélidos como llamas y alpacas.
Investigaciones arqueológicas han demostrado que estos animales convivían estrechamente con las familias de la cultura Chiribaya, al punto de ser enterrados junto a sus dueños.

El certamen, impulsado por el IPD, reunirá a 17 países del continente, entre ellos Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Panamá, Venezuela, República Dominicana, Paraguay, Costa Rica, Jamaica, Uruguay y Perú como anfitrión. Las competencias se desarrollarán del 22 de noviembre al 7 de diciembre.
La ceremonia contó con la participación del presidente del Instituto Peruano del Deporte (IPD), Federico Tong, y del presidente de la Asociación Canófila Peruana, Jaime Rodríguez Valencia, además de reconocidos atletas nacionales como Hernán Viera (levantamiento de pesas) y Luciana Zegarra (remo).
Hace unos meses, el Congreso de la República declaró al pastor Chiribaya como Patrimonio Cultural de la Nación, reconociendo su valor arqueológico, histórico y simbólico.
Según el Ministerio de Cultura, estos canes tenían orejas erguidas, pelaje corto y carácter dócil, siendo considerados guardianes y compañeros fieles de los antiguos pueblos del sur peruano.